
Sin embargo, Miley está mucho mejor y ayer se la pudo ver por las calles de Beverly Hills, California, tras acudir junto a su madre a un centro médico. Visiblemente molesta, y más abrigada de lo habitual, Miley no quiso que se la fotografiase e incluso se tapó la cara con la mano.
Un pequeño bache para la estrella, que hace solo unos días se mostraba feliz de saber que su hermano Trace iba a contraer matrimonio con Brenda Song, con quien espera su primer hijo. Es más que probable que Miley sea la dama de honor en tan feliz acontecimiento.
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